Rodrigo Ovide: ¿cómo meterse o sostener un partido cuando no se juega bien?

Os traemos un nuevo artículo de la sección de "Entrenadores" de Bullpadel. El protagonista de hoy es Rodrigo Ovide, ex jugador profesional y entrenador de pádel. En estos momentos es coach de Agustín Silingo,Tito Allemandi, Seba Nerone y Nacho Gadea; y se encargará de hablarnos de cómo mejorar al pádel cuando no se juega bien. 

Está claro que cuando estamos bien, y esto quiere decir: concentrados, activos, con energía, con control de bola, con definiciones certeras y todas buenas decisiones; no pensamos que está mal, simplemente fluye el juego. Empecemos por el principio.

¿Qué es estar bien y qué es estar mal?

ESTAR BIEN: cuando estamos bien sentimos:

• Físicamente incansable.

• Concentración máxima: nada te distrae.

• Lucidez: reacciono a todo de manera correcta.

• Sensación de control de bola perfecta.

• Decisiones correctas.

• Lenguaje corporal: festejo con brazos en alto, cara grande.

Como vemos, cuando estamos bien no tiene mucho sentido pensar y desde la labor del entrenador hablar (jajajaja).

Centrémonos en el malestar.

ESTAR MAL: cuando estamos mas sentimos:

• Físicamente: cansados, agarrotados.

• Distracción con cualquier cosa.

• Todo es tarde.

• Sin control.

• Decisiones malas.

• Lenguaje corporal: hombros caídos, mirada al suelo, silencio, etc.

La clave y lo que más abunda es la excusa, la mirada al de al lado, ¿no?. Pero sobre todo el no asumir la realidad.

Cuando uno piensa todo el tiempo en este tipo de cosas, pierde el foco de lo que hace, gasta energía de mas en algo que muchas veces no puede controlar (el compañero, el rival), si estás demasiado involucrado y preocupado por ello, afectará directamente a las cosas que controlas, (ej: como se falla algo que meto siempre o algún error muy tonto), por eso la idea es enfocarse individualmente para crecer como equipo.

Para ordenar nuestro juego y poder crecer en consistencia y en entendimiento con mi compañero debo jugar de manera fácil.

Nos centraremos en dos aspectos:

A. JUEGO.

1. DEFENSA: “Hacerse fuerte, sólido”.

• Jugar buenos globos en bolas fáciles y donde menos peligro tenga el rival.

• Jugar por abajo en bolas difíciles o cuando mi rival está retrasado.

• Buscar hacer el juego lento, esto hará que defienda más cómodo y con más

tiempo. Es mas fácil decidir mejor.

2. CONTRAGOLPE: “Simple y sin riesgo”.

• Esperar una equivocación en una bandeja o precipitación rival, bandejas muy cortas o con mucho rebote. Eso sí, esperar a que el rival golpee sobre o detrás de la línea de servicio, así tendremos más espacio para bajar la bola.

3. ATAQUE: “Dinámica, margen y elección”.

• Buscar con nuestros golpes profundidad apuntando a los pies rivales.

• Intentar generar espacios con bolas al centro para ir a los rincones o ángulos con más espacio.

• Cerrar más rápido y en bloque los espacios. Sí, leíste bien, hay que correr más.

• Elegir la definición con el golpe que más confianza tenga esperando que quede realmente cerca de la red.

B. MENTAL.

Muchas veces no se le presta atención, pero el lenguaje no verbal es muy importante. Como enumeramos anteriormente, cuando estamos mal se refleja en nuestro lenguaje corporal dando señales a nuestros rivales que lo estamos pasando mal.

¿Si estamos mal o bien cambia nuestro cuerpo? ¿O es al revés? La verdad es que es bidireccional.

Hay muchos estudios que demuestran que hacer cambios con nuestro cuerpo influyen directamente en nuestro ánimo y en nuestros pensamientos. Se suele decir que el pensamiento desata la emoción, por ello, si queremos sentirnos bien debemos pensar en positivo. Pero los nuevos avances indican que con solo 2 minutos de tomar una postura corporal correcta podemos cambiar ese sentimiento y el ánimo.

El estudio se realizó pidiendo a varias personas que den una muestra de saliva. A la mitad le pidieron que realicen posturas (individualmente y sin saber para qué) que lleve a lenguaje corporal negativo. A la otra mitad lo opuesto.

Al terminar el estudio notaron que con posturas más poderosas se tuvieron unos niveles de testosterona por encima de un 20% más de la muestra inicial, mientras que las posturas débiles mostraron un 10% menos de la inicial. Una diferencia del 30% es mucho.

Lo mismo con el cortisol (hormona del estrés), los poderosos lo bajaron un 25% mientras que los otros aumentaron un 15% teniendo una diferencia del 40%. Realmente es mucho.

Esto demuestra que bastan solo 2 minutos para provocar un cambio para sentirnos bien, más confiados y con menos estrés.

Les dejo el link del estudio.

COMO CONCLUSIÓN:

Si logramos de manera individual centrarnos en mejorar tanto en nuestro juego como en nuestra mente sin duda podremos cambiar la racha, si a ello se suma nuestro compañero tendremos grandes chances de pelear el partido, pero sin dudas, por más que se pierda nuestra sensación al terminar será mucho mejor.

Los invito a probarlo y comenten sus experiencias. ¡Un saludo y los espero en la próxima!

RO.

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